



LIBRO EN PREVENTA
INCLUYE POST IT DE REGALO
Delia Merriweather no cree en la magia. Pero sí cree en la familia, y resulta que su familia se identifica como bruja. Su falta de magia no empaña esta sincera creencia, porque según la tradición y la leyenda, están hechizadas. ¿Conveniente? Sí. ¿Verdad? Probablemente no.
Gracias a una extraña marca de nacimiento, el excéntrico círculo de mujeres de Merriweather cree que Delia es su bruja azul. En otras palabras, supuestamente es la persona capaz de restaurar la magia en el Aquelarre Merriweather. Sin embargo, A) la magia no es real y B) el hechizo es realmente horrible e ilegal en los cincuenta estados. ¿Quién va a hervir a un bebé, por Dios? Así que todos quedan completamente atónitos cuando Delia rompe accidentalmente el hechizo (sin hervir al bebé, obviamente). Se desata el caos y el caos, atrayendo la atención del invisible mundo de las brujas. Y eso incluye al sexy, melancólico y excesivamente irritable Max Halifax, quien recientemente se mudó a la casa de al lado para liquidar la herencia de su tío.
Justo cuando Max cree haber terminado su interminable misión —vigilar a las ineptas mujeres Merriweather—, descubre que Delia Merriweather ha roto el hechizo de su tatarabuelo. Le preocupa que, tras las aparentemente inofensivas travesuras de las Merriweather, se esconda la posibilidad real de que esta pandilla de brujas despistadas se apodere de su poder y, como sus ancestros, amenace con dominar el mundo de las brujas controlando los corazones de los hombres. Quizás ya esté empezando. Porque el corazón de Max late erráticamente cuando Delia Merriweather está cerca.